El City caía por 2-1 frente al Queens Park Rangers con sólo cinco minutos adicionados restantes en un partido que los Ciudadanos debían ganar para lograr un título de liga luego de 44 años.
Manchester City era claro favorito en los pronósticos, y con su victoria completaría una remontada de ocho puntos sobre el Manchester United en sólo seis partidos, pero el tiempo se acababa y el Etihad Stadium era puros nervios, pánico y desesperación.
"Somos Manchester City, lucharemos hasta el final" era el canto más popular en las anteriores semanas de la temporada, pero ésta vez, parecía que el título se escapaba de las manos.
Eso parecía, hasta que Edin Dzeko metió un cabezazo para igualar el marcador en el primer minuto de tiempo de descuento.
¿Un cruel final para que termine todo empatado o un poco de esperanza para lograr la remontada?
Segundos después, en un momento de extrema presión, en el minuto 93:20 el Argentino Sergio Agüero se sacó dos hombres de encima dentro del área y le voló el arco a Kenny, arquero del QPR, para darle la tan preciada Premier League después de 44 años al Manchester City.
Dos goles en tiempo de descuento al borde del abismo desataron la locura celeste... y sí... si no se sufre, no es Manchester City.
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